
Alberto Contador es uno de los corredores más exitosos, respetados y reconocidos de la historia. Decidido y apasionado, en la carretera el Madrileño podía ser explosivo o valiente según las circunstancias lo requirieran.
Como corredor, era más temido como escalador, aunque los resultados muestran que son sus habilidades generales las que hacen de su palmarés uno de los mejores en la historia de nuestro deporte.
Si bien las imágenes de Contador atacando en los ascensos son quizás las más icónicas, también es distinguido por su valentía en el descenso, los movimientos tácticos (tanto defensivos como ofensivos) y su disciplina metronómica en la contrarreloj.
Y aunque es famoso por ser uno de los siete corredores de la historia en ganar el Giro de Italia, el Tour de Francia y la Vuelta a España, un hecho menos celebrado es que, junto a Bernard Hinault, Contador es el único corredor que ha ganado cada una de las Grandes Vueltas más de una vez. Junto a sus muchos otros reconocimientos, Alberto es también el único cuádruple ganador del prestigioso premio Vélo d’Or.
Alberto corrió profesionalmente con equipos de alto nivel, incluidos ONCE, Discovery, Astana, Saxo-Bank y, hasta su retirada de las carreras profesionales, el Trek-Segafredo, de donde se despidió ganando la etapa final de montaña y el premio al ciclista más agresivo en la Vuelta 2017. En diferentes roles, Alberto Contador e Ivan Basso han coincidido en tres de estos equipos.
Este nivel de éxito en las carreras solo se puede lograr estudiando y entendiendo cada detalle; el carácter perfeccionista de Alberto no se limita a los esfuerzos físicos, sino también a todo el equipamiento y material. Esto supone un profundo aprecio por cada elemento del diseño, la construcción y la puesta a punto de la bicicleta, de cómo funciona a gran velocidad, bajo un gran esfuerzo y en todo tipo de condiciones.
Este nivel de detalle, este juicio minucioso de cada pieza, de cada componente, el nivel inusualmente alto para juzgar el rendimiento de un cuadro, son características esenciales del trabajo de desarrollo de producto de Alberto y de la marca AURUM.
Alberto, de 1,76 m de altura, monta una AURUM Magma talla 54.
«Sabía, cuando todavía estaba compitiendo, que quería encontrar una forma única de compartir mi experiencia con otros ciclistas, de crear una bicicleta del más alto nivel, de ahí surgió la idea de crear las bicicletas AURUM».
– Alberto Contador